La VII Asamblea Nacional Popular (ANP) realizada el día 20 de diciembre del 2014, en las instalaciones de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” en su acuerdo número 4, referente al proceso electoral 2015 acordó:“Esta ANP se pronuncia por el boicot a las Elecciones 2015, para ello hacemos un llamado al pueblo mexicano a preparar las condiciones en cada municipio, en cada estado y a nivel nacional, para hacerlo efectivo”.
Este acuerdo, muy pronto, logró tener la simpatía y adhesión de diversos sectores del pueblo mexicano, y se convirtió en un debate nacional, no porque fuera novedoso, sino porque representa el sentir de la gran mayoría de los obreros, campesinos pobres, indígenas, jóvenes, colonos de todo el país; de hecho desde hace más de 20 años, el porcentaje de participación popular en las elecciones del país ha sido mínimo, de tal manera que el acuerdo de la ANP sólo viene a dotarle de una perspectiva específica y una forma clara de participación política de las masas populares para expresar ese rechazo y repudio, no sólo hacia el proceso electoral, sino hacia todo el sistema político y económico vigente.
Pero ¿Porqué tanto rechazo al proceso electoral y por medio de ella al conjunto del sistema político mexicano?
Sencillamente, porque como en ninguna otra parte del mundo, en México, los procesos electorales son tan burdos y grotescos como medios para legitimar la dictadura de la oligarquía financiera nacional e imperialista, no ha valido ningún mecanismo de control, ninguna ley, ninguna institución ha sido capaz de maquillar siquiera, el sistema electoral mexicano, que cínicamente se ha convertido en el medio en que los grandes monopolios se dividen el poder económico, los narcotraficantes compran impunidad y hasta los jefes de cárteles son electos a puestos en diversos niveles de gobierno, pero eso sí, los procesos electorales están fuertemente blindados contra los intentos del pueblo, de buscar que sus verdaderos representantes lleguen a cualquiera de los mal llamados puestos de elección popular.
Los fraudes electorales se han convertido prácticamente en una tradición al menos desde 1988 cuando se impuso a Carlos Salinas de Gortari, jefe político del actual impostor de Los Pinos, Enrique Peña Nieto (EPN). En esta democracia farsante, todos los partidos burgueses, el PRI, PAN, PRD, PT, PVEM, MC y hasta el propio jefe actual de MORENA, han sido cómplices, pues una y otra vez han validado los procesos electorales, y se conforma en ser parte del millonario presupuesto del que han hecho su modus vivendi.
La oligarquía financiera a través de sus monopolios, financian de manera directa las campañas electorales de casi todos los partidos burgueses, a veces de manera más descarada como fue el caso de las tarjetas Monex y Soriana en las elecciones que legitimaron la imposición de EPN, otras veces menos cínicos, pero siempre, la oligarquía ha tenido al proceso electoral como otro medio de inversión para acelerar la acumulación de sus riquezas, sus títeres al llegar a los distintos escaños del poder político, les brindan todo tipo de facilidades para la concentración de la riqueza en pocas manos y el robo y despojo contra la mayoría de la población. Otra fuente segura del financiamiento, desde hace muchos años ha sido el narcotráfico, que funciona más o menos de la misma manera que las inversiones de los monopolios existentes legalmente en el país.
La seguridad de los procesos electorales también ha sido un problema central de las leyes de la materia, se considera como un problema de seguridad nacional el resguardo de la falsa democracia, es el Ejército y las fuerzas policiacas federales las que tienen la misión de salvaguardar los procesos electorales; y donde no lo hacen permiten que los sicarios del narcotráfico impongan su ley y sus candidatos.
Con la llegada de Peña Nieto, para perfeccionar el sistema electoral mexicano como un medio de legitimar la dictadura burguesa, y como parte de las reformas estructurales, se impuso la reforma política, que no fue más que un gato revolcado; se le cambió de nombre al órgano electoral, pasando de ser Instituto Federal Electoral (IFE) a Instituto Nacional Electoral (INE), se centralizó en manos de los amigos de EPN, despareciendo los 32 institutos electorales locales que existían, aumentó el porcentaje de votos para que los partidos pequeños mantengan su registro, aumentaron los requisitos para el registro de un nuevo Partido Electoral, en fin, se tomaron todas las precauciones para evitar que se infiltre algún verdadero representante popular. Supuestamente se abrió la posibilidad de las candidaturas independientes con tantos candados, que prácticamente es como si no existiera tal posibilidad, o sólo para que los monopolios de manera directa puedan tener a sus alfiles en las entrañas del poder político. De manera demagógica se incrustaron a la ley electoral palabras como Consulta Ciudadana, que ya pasó la primera prueba con los millones de firmas que solicitaron Consulta sobre la reforma energética, pero fueron anuladas de tajo los suspiros legaloides de sectores de la pequeña burguesía, así que la Consulta Ciudadana resultó ser un broma pesada de los dueños del poder, porque resultó ser menos que nada.
Los gastos absurdos del proceso electoral 2015.
En un país donde hay más de 90 millones de pobres, un país convulsionado políticamente por tantos reclamos de salud, educación, vivienda, trabajo y justicia, puede resultarle increíble a cualquiera, que para el circo electoral se destine una millonada; pero bajo la dictadura burguesa a la mexicana, esto es totalmente posible, el recién estrenado INE aprobó su presupuesto para el 2015 por la módica cantidad de 18 mil 572 millones 236 pesos, de los cuales 13 mil 216.8 millones serán para gasto operativo y 5 mil 356 millones de pesos para los bolsillos de los partidos políticos burgueses, desde luego, la mayor parte de este recurso se lo repartirán entre los amigos del presidente que están en el PRI, el PAN y el PRD (la ley así lo mandata); pero los gastos no quedan hasta ahí; también se ha legalizado que los grandes monopolios, la oligarquía de manera directa pueda destinar 1 mil 530 millones de pesos como inversión al proceso electoral, a lo que el INE le llama financiamiento privado, que puede ingresar a las arcas de cada uno de los 10 partidos políticos que contenderán en este proceso electoral. El total los partidos burgueses y sus candidatos en el país en este año, de manera legal podrán gastar y comprobar sin ningún problema legal un total de 6 mil 886 millones de pesos ¿Cuantas viviendas podrían construirse con tal cantidad? ¿cuantos niños podrían alimentarse? ¿Cuantos puestos de trabajo podrían crearse? ¿Cuantos médicos y enfermeras podrían contratarse?…
Ahh… Pero hemos hablado de los recursos que legalmente pueden tener acceso los partidos que participarán en este proceso electoral, sin embargo ¿Hay algún mexicano que crea que se conformarán con los recursos obtenidos de manera legal? Los cárteles del narcotráfico, existen en todo el territorio nacional ¿estarán cruzados de brazos en esta contienda?, ¿las mineras canadienses y norteamericanas, no querrán tener presidentes municipales a modo para avanzar en el despojo de las tierras? ¿Las petroleras gringas, no les interesará invertir en el proceso electoral?
Máxime, cuando el mismo personero que limpió el cochinero de sobregastos de EPN en las elecciones 2012, es ahora el jefe de la unidad de fiscalización del actual INE ¿Quien cree que hará una labor trasparente? Desde ahora cancelaron el contrato con una empresa reconocida internacionalmente para esta labor de fiscalización, seguramente para contratar a otras empresas a modo.
Pasando de lo absurdo y grotesco a lo patético del proceso electoral 2015, hablemos de la basura mediática que aturde al pueblo mexicano en todos los medios masivos de comunicación: radio, televisión e internet; al mismo tiempo que todo un ejército en las calles, en los semáforos, en los anuncios espectaculares, y a través de todos, todos los medios posibles ha desatado esta andanada de propaganda electoral basura. Tan sólo los spots, únicamente en los 40 días de la precampaña que irá del 10 de enero al 18 de febrero se transmitirán en el país 11 millones de spots , lo que quiere decir, que por cada minuto del día estarán trasmitiendo tanto en las frecuencias de radio como en los diversos canales de televisión alrededor de 191 spots que promueven pre-candidatos y al propio INE, ¡Sí! Leyeron bien ¡¡191 spots por minuto, 270 mil spots diarios!! He ahí lo patético del aturdimiento mediante el que quieren legitimar un sistema podrido, un sistema descompuesto, un proceso electoral totalmente desacreditado.
¿Entonces, qué con el Boicot?
Por las razones antes expuestas, está creciendo el debate sobre el boicot electoral, el pueblo ya no está dispuesto a legitimar más un proceso electoral tan vulgar como el que tenemos en frente. Ayotzinapa y Guerrero son la punta de lanza de la tendencia. De hecho en muchos municipios de Guerrero, que abarcan varios distritos, es un hecho que no se ha permitido que el INE realice el proceso electoral, desde ahora, se ha evitado por todos los medios, y lo han hecho las grandes mayorías, con movilizaciones multitudinarias; lo conveniente es que en mucha otras partes del país se vayan creando estas mismas condiciones para que el boicot sea efectivo. A partir de que la ANP llamó al boicot, muchos sectores de intelectuales, artistas, periodistas, sacerdotes, se han pronunciado por el boicot, sin embargo muchos llaman a la pasividad, es decir sólo a no votar para no legitimar el sistema político, esto resulta limitado, frente a la coyuntura de ascenso de la lucha popular, es necesario llamar a un boicot como se está haciendo en Guerrero: Impedir por todos los medios la realización del proceso electoral.
Los miembros de la oligarquía financiera, los diputados y senadores, los gobernadores, el secretario de gobernación, los jefes del ejército, la marina, la gendarmería nacional, los presidentes municipales, los dirigentes de todos los partidos políticos burgueses y sectores reaccionarios de la iglesia están haciendo un frente común para defender su proceso electoral, seguramente lo querrán hacer al más puro estilo fascista, sacando al ejército y las fuerzas federales a intimidar y agredir al pueblo; sin embargo, frente a esta intentona, la unidad, la organización, la disciplina, la planificación y una efectiva intercomunicación de todo el movimiento organizado con el pueblo de México será la única respuesta posible para avanzar el camino del boicot al proceso electoral. Estar vinculados con todas las luchas populares, sólo el respaldo de nuestro pueblo y en unidad férrea nos conducirá a la victoria.
Nueva Constituyente y Nueva Constitución es el camino.
Muchas personas se han preguntado si las elecciones no son la solución, entonces ¿Cuál es la alternativa? A estas alturas ya no es difícil encontrar la alternativa, porque al lado de la creciente tendencia del boicot al proceso electoral, esta creciendo el número de quienes se están adhiriendo a la idea de que sólo el derrocamiento de EPN y toda su camarilla enquistada en los tres poderes de la unión, puede iniciar verdadero proceso de cambio; esa alternativa también ya está a la orden del día, se está convirtiendo en un debate nacional, cada vez somos más los que decimos que única alternativa es la instauración de un Gobierno Provisional Revolucionario que convoque a una Asamblea Nacional Constituyente Democrático y Popular, el cuál debe promulgar una Nueva Constitución, donde se le dote al país un nuevo sistema económico y político, bajo la perspectiva de un Gobierno de obreros y campesinos pobres. Como parte del camino hacia el Socialismo.
Es necesario que tanto el 26 de Enero, en el marco del VIII Día de Acción Global por Ayotzinapa, y en el aniversario de la promulgación de la Constitución actual, el 5 de febrero, los cientos de miles que saldremos a las calles, reafirmemos nuestra convicción por asumir nuestra propia perspectiva, acompañándola de la ruta hacia la Huelga Política General, y la construcción de la Asamblea Nacional del Proletariado y los Pueblos de México.
Alcanzar nuestros objetivos en esta etapa de lucha dependerá del grado de acumulación de fuerzas, pero lo que está mucho más claro es que las elecciones 2015 pasarán como las más repudiadas de la historia de México.
* Florentino López Martínez es Presidente Nacional del Frente Popular Revolucionario y miembro del Comité de Coordinación de la Liga Internacional de la Lucha de los Pueblos (ILPS)
Artículo publicado en:
-http://kaosenlared.net/mexico-las-elecciones-2015-las-mas-repudiadas-de-la-historia/

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