El año 2017 ha iniciado con fuertes sacudidas para la economía de los millones de proletarios que sostienen este país a base de su fuerza de trabajo, el aumento al precio de la gasolina, como aplicación práctica de la reforma energética impuesta por el gobierno mexicano, ha golpeado a todos los sectores de la sociedad, con excepción de aquellos que impusieron dicha medida, como los partidos políticos electoreros representantes de los Azcárraga, los Slim, etc. Y sin duda, la juventud viene a recibir principalmente los estragos de dicha medida, lo único que el gobierno de Peña ofrece a los más de 30 millones de jóvenes que hay en México con este nuevo aumento es una pauperación de su vida a corto, mediano y largo plazo, mediante el encarecimiento de los productos y servicios básicos para vivir. Las condiciones laborales para estos millones de jóvenes se irán deteriorando cada día más como producto de dicha reforma y el ejército de desempleados aumentara sus filas. Miseria, hambre, desempleo, violencia y muerte es lo único que ha traído el pacto por México y su paquete de reformas. Por ello, la única salida es que los jóvenes tomen cartas en el asunto y comiencen una lucha sin cuartel por echar abajo dichas leyes y medidas austeras que condenan a todo el pueblo a una vida de opresión y explotación descaradas. 

Hoy el futuro, no solo de México sino también del mundo entero, recae en gran medida en el que hacer revolucionario de los jóvenes, en ellos está la fuerza necesaria y el ímpetu para sepultar por completo al único mal de todos los males, el capitalismo imperialista, que domina en todos lados. Y el primer paso para revertir el gasolinazo y demás cosas que se vienen, es la organización de la juventud, tanto en la Ciudad de México como en los demás estados, sin esa herramienta elemental será estéril cualquier intento de lucha espontánea que se pueda dar en el marco de cualquier coyuntura. Lo primero es crear organizaciones juveniles, de estudiantes, dedicadas a la cultura y el arte, de trabajadores, etc., es decir, hoy la UJRM debe crecer en todos los sectores donde hay juventud. El papel de los jóvenes en la pelea callejera contra el gasolinazo debe ser de avanzada, se debe lograr volcar a las calles a los millones de jóvenes que son golpeados por este tipo de medidas.

 ¡Por la unidad de la juventud proletaria rumbo al socialismo!