En México viven 38 millones de Jóvenes que representan ya más del 30 por ciento de la población del país, este creciente número de jóvenes es uno de los principales sectores de la población golpeados por el sistema capitalista cuyo nivel de explotación y depauperación está creciendo con la imposición de las reformas estructurales. Una tendencia consecuencia de estas reformas es  la proletarización exponencial de la juventud, tanto de origen campesino, como de la misma pequeña burguesía de las ciudades, por un lado con el despojo de tierras y la falta de oportunidades en el campo, por el otro con la tecnificación de la enseñanza enfocada a la producción de mano de obra barata calificada como única alternativa para este sector de la población. La Juventud se está enfrentando al crecimiento de los monopolios, la privatización de los sectores públicos,  la eliminación de los derechos laborales, la reducción de salarios por la alta demanda de desempleados y a esto se suma el  aumento del costo de la vida que en estos momentos sigue creciendo con el aumento de la gasolina, la caída del peso frente al dólar, y demás fenómenos que son producto de la condición esencial de la crisis general del capitalismo. Ante esto el futuro  y el presente de la juventud en las manos de la burguesía está claro,  es por ello que para la UJRM la única alternativa es la de la revolución proletaria es decir la toma del poder de las amplias masas populares con el proletariado al frente,  que eche abajo no solo las reformas estructurales y a EPN, sino a todo el  estado burgués. Convencidos de este objetivo estratégico  requerimos para  este periodo la organización de acciones de masas que pasen a la ofensiva y golpeen a la burguesía, es por ello que somos impulsores y organizadores de la huelga política general,  que será resultado por un lado de la creciente inconformidad de las condiciones materiales de las masas, del ánimo de lucha que estas vienen adquiriendo y por otro lado será resultado del desarrollo político del movimiento popular que depende en gran medida de lo que los revolucionarios y los comunistas hagamos,  la juventud estudiantil y sobre todo la juventud proletaria deben convertirse en protagonistas de la organización de la Huelga política General, es por ello que es necesario fortalecer los instrumentos del Frente Único de la juventud  tanto en lo organizativo como en su posición política, de ahí se desprenden las tareas para estos primeros meses del año, la UJRM a la par que debe cumplir y fortalecer todas la acciones emanadas por la Asamblea Nacional Popular para que estas  se generalicen en todos los rincones del país, debemos fortalecer  la convocatoria a la reunión de la promotora del campamento nacional de la juventud Antifascista y Antiimperialista para este 14 de Febrero,  llamando a la juventud de todo el país a participar en la construcción de este proceso unitario en el que sus tareas centrales son el fortalecimiento del Frente Único y la organización de  la Huelga Política General, también debemos contribuir a  la construcción de la Coordinadora Nacional Estudiantil en todos los rincones del país, como proceso unitario con perspectiva ya definida, que ya viene reivindicando la organización de la Huelga y que ya ha venido integrando a los principales procesos organizativos del sector estudiantil en el país.  
Aunque algunos sectores de la pequeña burguesía socialdemócratas y pacifistas traten de convencer a la juventud y al conjunto del movimiento popular de que existe una salida conciliadora con la burguesía a esta situación, tratando de frenar la organización de la Huelga General  y buscando centrar la atención de las masas en acciones simbólicas de protesta y en el proceso electoral como alternativas, la lucha y confrontación de las masas en Guerrero, los pasos fascistas del estado para frenar el descontento en todo el país, la bancarrota y la crisis política del estado mexicano, la movilización y el paro nacional del 6 de enero de  enfermeras, reafirman que el camino que hemos venido trazado y los objetivos planteados son los necesarios para el proceso de lucha de las masas en la coyuntura actual.