100 años han pasado desde que se fundó la Escuela Normal Rural “Vasco de Quiroga”, ubicada en Tiripetío, Michoacán. A través de la historia de esta normal, así como de muchas otras escuelas normales rurales en todo el país, está impregnada de la lucha de los estudiantes, maestros y pueblo en general.

Ha sido participe de la formación de miles de docentes en toda su historia, las etapas más arduas de la lucha popular han dado a la Normal una infinidad de experiencias y sigue siendo una fuente inagotable de maestros rurales que abanderan las demandas populares. 

Este año 2022 además de tener el título de la primer Escuela Normal Rural en toda Latinoamérica, también se cumple el primer centenario desde su fundación y a 100 años desde que abriera sus puertas la conciencia no se ha visto desgastada ni mermada. Sin embargo, las malas políticas públicas y la ofensiva del régimen de los diferentes personajes que han estado en el poder en México, han intentado por todos los medios no solo de disminuir las fuerzas y organización de las normales sino de destruirlas como tal.

Hoy festejan su primer siglo de existencia con estudiantes bajo procesos penales. Desde febrero de 2022, 64 normalistas cumplen medidas cautelares que les impiden participar en eventos políticos o manifestarse de cualquier forma. Siete normalistas fueron sentenciados en 2020 por el delito de “obstrucción a las vías de comunicación”.

El sistema de internado ha sido unos de los pilares de las normales porque permite a los estudiantes de más escasos recursos poder continuar con sus estudios, sin embargo, la política neoliberal, el linchamiento político, la criminalización de la protesta social, le han quitado a las normales del presupuesto necesario para poder existiendo.

También las normales rurales se caracterizan por albergar a hijos de campesinos, jóvenes con escasas condiciones económicas se forman como docentes para trabajar como maestros en las zonas rurales de nuestro país. Uno de los ejes de formación fundamental de las escuelas normales es el Módulo de Producción, donde los alumnos se mantienen en contacto con el medio rural al aprender a trabajar la tierra, para como su nombre lo dice, implementar estos modos de producción en las comunidades, para poder trasformar su realidad.

Pese a todo ello, a 100 años de su fundación la escuela normal Rural de Tiripetío, es muestra de resistencia y coraje contra la embestida de gobiernos pasados y del gobierno en turno, a pesar de haber tenido un incremento en su presupuesto, no es suficiente para otorgar educación con mejores condiciones, que sea liberadora y emancipadora, que considere su diversidad, para preparar futuros docentes que sepan interpretar las urgencias de las comunidades.

Es por ello que es necesario y vigente a un siglo, mantener la lucha por la educación, por la permanencia de las normales rurales y en general de todo el país ya que ha sido la organización lo que les ha permitido perdurar a través de los años.