El próximo 16 de noviembre se llevará a cabo el Congreso Nacional Ordinario de la UJRM en Guadalajara, Jalisco, donde actualmente nos organizamos en torno a las reivindicaciones de la juventud y el proletariado.
Uno de los principales terrenos de lucha de la UJRM en Jalisco, es la Universidad de Guadalajara (UDG). Durante el último año, hemos exigido a las autoridades de esta institución que se pronuncien oficialmente contra el genocidio en Palestina y que rompan cualquier relación académica, económica o cultural con Israel.
Pero, en la práctica, ¿qué ha hecho la UJRM para luchar por ello? En mayo, convocamos a una asamblea que resultó en dos campamentos, uno en un centro universitario y otro en la Rectoría General de la UDG. De esta manera, se abrió una mesa de diálogo, que después cerraron las propias autoridades. Marchamos, cerramos una calle, hicimos actividades político-culturales y, finalmente, cuando el rector asistía a un informe, lo enfrentamos para pedirle que la UDG se pronunciara y que abriera una mesa de diálogo. La respuesta fue ineficiente, pero representó un logro para el movimiento estudiantil, ya que el rector se pronunció públicamente en su informe.
Sin embargo, las relaciones con Israel no han sido transparentadas ni se han roto. El diálogo no se ha abierto nuevamente y continuamos organizándonos para que esto se haga realidad. Por eso, necesitamos que más estudiantes se sumen a las acciones. Estamos visitando diferentes centros universitarios para sondear la opinión del estudiantado: ¿están de acuerdo con que la UDG rompa relaciones con Israel? Una aplastante mayoría sí lo está. El siguiente paso es que formen parte del proceso organizativo que pelee por esto. En este contexto, se acerca la toma de protesta del Consejo General Universitario, que es el máximo órgano de gobierno de la UDG. Este órgano tiene la capacidad de decidir que la Universidad rompa relaciones con el Estado que consideramos genocida de Israel.
Estamos segurxs de que esto es posible, pero no sucederá por voluntad del propio CGU. Por eso, es necesario que estudiantes y docentes continúen firmes en esta exigencia. Lo más inmediato será hacernos presentes en la toma de protesta. ¡Únete!